Genexus

No, no es el título de ninguna película de suspenso... ¡es una crónica real!
Esto pasó en São Paulo (Brasil) con un funcionario de la Walita , y salió en todos los diarios.

Era un casamiento con cerca de 300 invitados. Después de la ceremonia, durante el brindis, al inicio de la fiesta, el novio se levantó, fue hasta el escenario y agarró el micrófono. Dijo que quería agradecer a todos por haber venido de muy lejos, para asistir a su casamiento, y especialmente a su nuevo suegro por haberse hecho cargo de una fiesta tan espectacular.

En agradecimiento a todos los regalos que recibieron, él dijo que quería ofrecer a todos un regalo especial, solo de su parte. Pidió a todos que abriesen los sobres que estaban pegados con cinta de embalaje, abajo de las sillas. Todo el mundo con esa cara de 'que cosa original', 'que lindo', etc. Hasta que abrieron el sobre... Dentro de ellos estaban dos fotografías tamaño 20x30 del padrino de casamiento, (en Brasil, el padrino NO ES EL PADRE DE LA NOVIA, sino, algún amigo muy querido o especial) teniendo relaciones sexuales con su novia, ¡ahora esposa!! Él había sospechado de la relación de los dos, unas semanas antes del casamiento y contrató un detective para seguirlos, confirmando sus sospechas.

El novio durante algunos segundos se quedó sonriente observando las reacciones de los invitados, se dio vuelta, mirando al padrino y a la novia, les dijo: "que disfruten de la fiesta" y se marchó, dejando a la multitud estupefacta.

El casamiento fue anulado dos días después, conforme las leyes brasileras.

Mientras la mayoría de nosotros habría acabado con el noviazgo inmediatamente después de descubrir la traición, él no... Dejó la cosa seguir adelante como si nada habría pasado. Con su venganza consiguió: Que los padres de la novia pagasen más de R/$ 32.000 (equivalente a aproximadamente a $ 20.000 dólares) por un casamiento para más de 300 invitados (el padre de la novia, un militar retirado, probablemente va a hacerla pagar de alguna forma) y que todos se enterasen exactamente como fueron las cosas).

Si él hubiese cancelado antes la ceremonia, la familia de la novia sólo sabría la versión de ella y probablemente muy pocos invitados conocerían la verdad.

Terminó con la buena reputación de la novia y del padrino en frente de todos sus amigos, padres, hermanos, abuelos, sobrinos, tíos, compañeros de trabajo, etc.

En otras palabras:

¡Estas sí que son venganzas carajo!